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Hombre Argentino | 22:49

Un libro o una revelación.

¿Que es la Biblia?

Lo que hoy conocemos como el libro llamado Biblia, o Santa Biblia no es otra cosa que la colección de libros reconocidos como sagrados o canónicos es decir los que se reconoce como de “inspiración divina”. La Biblia, consta en realidad de sesenta y seis libros divididos en dos partes, Antiguo y Nuevo Testamento y cada uno de estos libros fue dado a mas de cuarenta autores a lo largo de 1600 años no solo siendo estos de diferentes épocas, idiomas y lugares, sino también de situaciones de vida distintas; tengamos en cuenta que hubo desde reyes hasta trabajadores u obreros.

También es necesario reconocer que esta cantidad de libros que la componen es debido a la dificultad natural que existía, recordemos que no fue hasta entrado el siglo XIII en que Gutenberg perfecciono la imprenta. -Mal considerado el inventor de la misma.- Así y todo con el gran avance que significo la imprenta para la humanidad, hasta hace pocos años los escritores debían hacer malabarismos con la maquina de escribir si tenían alguna equivocación y hasta llegado el caso debían de desechar la hoja escrita. Fue recién a finales del siglo XX que para el común de las personas comienza la era de la informática que ha hecho posible que lo que antes llevaba años hoy tenga la posibilidad de ser plasmado en hojas de papel en horas.

¿La Biblia es la Palabra de Dios?

Esta es una pregunta aparte de muy frecuente para muchos también muy común de serle hecha a los creyentes.

¿Pero porqué el cristiano dice y asevera que esto es así? Si algunos ni siquiera tienen una respuesta clara en palabras para dar, pero si en la experiencia vivida. Bueno ahora vamos a dar una respuesta en palabras escritas. Esto es así porque es necesario tener en cuenta la inmutabilidad de la Palabra de Dios, es decir que su palabra no cambia, el único responsable del cumplimiento es El, por supuesto y esta de más aclarar que en los casos personales esto sucederá si cumplimos con nuestra parte. Esta inmutabilidad es también demostrable que aunque muchos de los libros de la Biblia fueron escritos en los comienzos del conocimiento humano y en una época en que sus autores ignoraban por completo los modernos descubrimientos, lo que ellos escribieron sin embargo, no ha podido ser nunca contradicho por descubrimientos posteriores hallándose también estos escritos sorprendentemente adaptados a modernas situaciones.

Es cierto que Dios utilizo escritores humanos, sin embargo aunque estos hombres no pudieran haber comprendido todo lo que estaban escribiendo – a titulo personal ellos si comprendían, lo que escribían, pues la revelación de Dios es completa y perfecta-, fue bajo la mano directriz de Dios que produjeron cada uno de estos autores los libros que componen la Biblia y en los que podemos hallar una fascinante continuidad, lo que es una constante y maravillosa evidencia de la clara guía del Espíritu Santo.

También podemos ver el uso del tiempo verbal presente de una forma legítima en la revelación, por lo que en las enseñanzas que encontramos en las sagradas escrituras son claras y aplicables a las vidas de las personas, en situaciones diarias y particulares.

En conclusión la Biblia tiene y persigue como objetivo y propósito, el ser la revelación: del SER, las OBRAS, y el PROPOSITO de Dios para con nosotros su creación, por lo que es razonable decir que Dios en su infinito amor busco revelarse a los hombres y por consiguiente es también esencial para el cumplimiento de los propósitos de Dios para con su creación, propósito que no es otro, que el de que todos seamos llamados a la redención y salvación para volver a vivir una vida en autoridad y comunión con el Padre. Y es solo por medio de su Hijo Jesucristo que esto puede hacerse realidad, es una confesión de fe, una declaración de amor con nuestros labios, el apóstol Pablo escribe en la carta dirigida a los romanos, “…Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón. Esta es la palabra de fe que predicamos: que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.” Mayor revelación que esta del propósito de Dios y de cómo llegar a tomarlo para nosotros de una manera fácil y sencilla no existe.

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