Algoncas | 21:26
Porques y discriminación
¿Cuantas son las veces en que nos preguntamos los porqués? y ¿cuantas las que no les podemos encontrar una respuesta satisfactoria? Entonces cansados preferimos dejar caer nuestros brazos y ver pasar la vida.
Existen infinidad de casos en que las personas se ven envueltas en actitudes que no los dejan salir del pozo lleno de cieno o de la situación en que se encuentran y en casi todos los casos es debido al sentimiento y a la discriminación que sufren por su apariencia. Sin embargo están también aquellos que se enfrentaron a esa exclusión sufrida y pudieron sobresalir. Demostrando a esa parte de la sociedad que desganada aceptaba su porvenir que su destino podría ser distinto. Como ejemplo podemos citar al cartonero Juan R. Núñez quien fue el productor de FM la Milagrosa que recibió el premio de manos del príncipe Carlos por su logro, o ha Maradona quien paso de villa Fiorito al country, o ha Einstein quien por demostrar cuando niño una cierta dificultad para expresarse se lo caratulo como poseedor de un retardo mental, u a Onassis quien comenzó su fortuna con un pequeño capital estudiando el mercado de los grandes inversores y muchísimos otros casos comunes a usted y a mi, incluyéndonos. Quien hubiera dado una moneda por cada personalidad de estas, sin embargo cuando llegaron a sus lugares correspondientes muchos quisieron sentarse a su lado o compartir su mesa.
Fueron estos hombres 'creyentes', en realidad para este articulo no viene al caso dilucidarlo sino utilizarlos como ejemplo de lo que es posible llegar cuando se deja atrás el miedo a lo desconocido.
Por otro lado también es cierto que el común de los mortales no entiende el porque del triunfo de los protestantes o creyentes u evangélicos como son llamados en la actualidad. Y entonces se cae en dos respuestas: por un lado se le trata de ignorar o de defenestrar y por el otro se lo trata de entender de buscarle el porque para tener lo mismo.
Max Weber autor alemán, nacido en una familia protestante y bien posicionada escribió el libro La ética protestante y el capitalismo realizando un estudio empírico y puedo asegurar un inmenso estudio hermenéutico de las palabras de la Biblia para llegar a dilucidar el éxito que tienen las personas que han permitido que el Señor intervenga de una forma activa en sus vidas. No obstante este estudio el cual es recomendable su lectura, es necesario mostrar que lo que lo movió ha hacerlo supuestamente a este autor fue la curiosidad o como diría el mundo la sana envidia a la pregunta, ¿Por qué ellos sí y yo -u los otros- no?
Y esta pregunta tiene en si misma un gran peso social porque lleva implícita una gran carga de discriminación que es derivada del juzgar a los demás a través de anhelar las posesiones de los otros, al centrar nuestra vista en ello. Cuando juzgamos o etiquetamos a los demás por lo que vemos estamos encerrándolos en distintas áreas y sin querer también nos estamos perdiendo lo mejor de la riqueza que ese ser humano posee y puede generar como persona igual a mí.
Y he aquí la diferencia, la respuesta a la incógnita de tantos, el creyente reconoce y le otorga la veracidad que corresponde a las palabras de Jesús cuando enseña que con la misma vara que juzgas a otro serás juzgado. Comprende le da significado a la fuerza de este dicho., asimilándolo y no discutiéndolo. Por lo que la pregunta del porque el si y yo no a la que se hacia mención antes pierde el sustento y la validez. Ya no hace falta averiguar porque ahora me encuentro ocupado en conocer al que me rodea, en ayudarlo a crecer y si hace falta en darle o tenderle una mano.
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