Para llegar a una democracia plena ¿hace falta una 'Royal Commissión' Argentina?

Opinión.- Vengo observando desde hace un tiempo en diferentes ediciones del diario Italiano Corriere Della Sera, que en aquel país está aconteciendo algo similar a lo que sucede en la Argentina referido a los movimientos políticos que los gobernantes imponen al Estado Nacional, y consecuentemente al gran pueblo.
El objetivo de este artículo no es la crítica a los gobernantes, que ya sabemos cómo trabajan tanto en lo político, como en lo social y económico, sino tratar de ubicar el tema en un contexto de solución a los problemas que nos aquejan. En cuanto a política se refiere, se mueve a los funcionarios de las distintas áreas como títeres, cuyo manejo también extienden incluso a los otros poderes del Estado.
En lo social tratan de arreglar la pobreza, falta de trabajo, etc. con planes que no tienen asidero consistente y en una dirección que no llega a una definición. Se dispone de las arcas públicas con una discrecionalidad asombrosa. Todo posible comentario a desarrollar sobre estas irregularidades, por demás notorias ya, queda a criterio del lector.
Me refiero a como se deberían tratar los grandes temas nacionales, en especial los que tenemos a la vista, como por ejemplo, el problema del campo en lo relativo a exportaciones, retenciones, consumo interno, sistema electoral con sus reformas políticas y por supuesto sin olvidarnos de la inflación, en fin, diversos problemas que son cruciales para la vida de los ciudadanos argentinos. 

Estimo debería existir y es lo que estoy proponiendo, que se intente como lo está considerando el articulista italiano, arribar a un sistema similar al de Inglaterra: una “Royal Commissión” el cua es un organismo compuestos de expertos, en los que el parlamento Británico confía, cuando quiere reunir los consejos necesarios para una reforma política o tratamiento de algún tema importante, funciona sin condicionamientos políticos, sin intereses partidarios, e integrado por hombres diferentes en cuanto a sus actividades, tales como magistrados, profesores universitarios, abogados, etc. todos “en reposo” es decir extraños a las batallas políticas.
No cree Ud. señor lector que sería ¿una forma diferente en Argentina de encarar la mejor organización del país mediante un sistema como el comentado? Y no de una “mesa redonda” donde generalmente se inscriben políticos y/o funcionarios de turno, o personas con ánimo de alcanzar un cargo en el Estado, para luego “consensuar” reglas de juego.
Las Cámaras del Congreso en Argentina, no funcionan correctamente y han estado en la misma dinámica desde su creación, pues se intenta siempre de “lograr” un quórum favorable para la votación de tal o cual Ley, sin importar los beneficios o no, que podría reportar a la sociedad en su conjunto, sino a las conveniencias del mandamás de turno.
En definitiva, si existiese aquí en Argentina un Organismo como el comentado, alcanzaríamos seguramente un dictamen completo e imparcial sobre un tema en particular, al cual debería confiarse el Poder Legislativo, y por supuesto, publicado previamente para conocimiento total del PUEBLO.
¿Se logrará algún día cambiar políticamente el sistema imperante y la mentalidad mezquina de los políticos?

por Alberto Vélez