Suzuki no se quiere quedar fuera del mercado argentino de motos.

Buenos Aires.- El gerente general de Suzuki en la Argentina, Juan Carlos Mas, dijo ayer que la empresa "no quería quedarse afuera" del mercado argentino, tras el anuncio de la instalación de una nueva planta en el partido de Bolougne en San Isidro.

La empresa japonesa que también se ha visto damnificada por el Tsunami sucedido en Japón, no ha querido perder la cuota del mercado argentino que imprevistamente vio como se le cerraba al anunciar el gobierno argentino la limitación a las importaciones. 

Suzuki que tenía planeado desembarcar en nuestro país de la mano del representante en Argentina de Subaru (Indumotora), debió suspender sus planes y comenzar ha realizar un proyecto de inversión comenzando por presentar un plan de inversiones a la ministra Debora Giorgi para sustituir importaciones por más de 10 millones de peso.

En referncia a esto Juan Carlos Mas explicó que "Suzuki no quería quedar afuera de este mercado", y opinó que "la mejor forma de estar es haciendo motos en Argentina". En la actualidad, se venden 650 mil motovehículos en la Argentina, mientras que en 2001, cuando Suzuki abandonó sus negocios en el país, sólo se comercializaban 29 mil unidades al año.

El ejecutivo dijo que en un primer año la planta, que en un principio sera financiada por el Estado argentino con un préstamo por más de 1 millon de pesos, empleará dos turnos de 18 trabajadores y producirá unas 10 mil motos, producción que la empresa espera duplicar el año que viene.

La inversión total alcanza los 1,7 millones de pesos, en parte financiados por los Fondos del Bicentenario que otorga el Ministerio de Industria.