¿Todo tiene sus límites en el Señorío de Dios? El Pecado

El siguiente articulo fue realizado por el hermano Lizardo Coronel y en el destaca un tema ya pocas veces tratado por su dureza para ser escuchado por la sociedad actual la cual se maneja por la cultura de lo relativo, alivianando los efectos del pecado al llamarlo 'error' una acción contenida dentro del pecado pero que no lo es en su todo.

Lizardo comienza su articulo indicándonos que todas las acciones tienen sus responsabilidades, poseen sus limites en cuanto a la tolerancia de Dios, por lo que todos los que le pertenecemos a ÉL -los hijos de Dios- ademas de escudriñar las Escrituras tenemos que escudriñarnos a nosotros mismos y cuestionarnos ¿sí en verdad es agradable la vida que llevamos delante de Dios?. 

Aunque el proverbio diga que: "Con misericordia y verdad se corrige el pecado, Y con el temor de Jehová los hombres se apartan del mal" (Pr 16:6), Dios es un padre bueno y por tanto debe disciplinar a los hijos que ama, pues aunque no nos parezca en un principio causa de gozo, sino de tristeza, luego da frutos buenos en nuestro carácter y vida diaria. (He. 12:5-11)

Coronel para traer un poco mas de claridad sobre el castigo u disciplina de Dios sobre el pecado y  el pecador, se refiere a los sucesos acaecidos en el tiempo de los reyes de Israel, en el que se da una vindicación completa e impresionante de la manera divina de proceder al castigar a su pueblo tan privilegiado, pero rebelde y apóstata. No hay que extrañarse de que en una perversión tan grosera del culto del Dios verdadero, y la tendencia nacional de reverenciar a los ídolos, la paciencia divina se agotara; y que el Dios a quien ellos habían abandonado, les permitiera ir a gran parte de la nación en cautiverio, para que aprendiesen la diferencia entre el servicio en libertad a él, y el servir en esclavitud a sus conquistadores malvados y despóticos (2 Reyes 17:23).

Algunos de lo que leen este articulo quizás piensen que el pecado no es preocupante porque: (1) Dios está para perdonar; (2) que Dios es amor y no castiga; (3) que el pecado no es tan malo, nos enseña lecciones valiosas, o (4) debemos mantenernos dentro de la cultura que nos rodea. 

Es cierto que la gracia de Dios es inmensa, pero Dios no puede pasar por alto el pecado, por la razón divina que Él aborrece el pecado por tanto los pecadores, sin importar las excusas que expongan, tendrán que responder ante Dios por sus pecados. Así que, mis amados hermanos aprovechemos todos los recursos que Dios nos concede a través de su Palabra, para no seguir incurriendo en pecados e idolatrías, y que el mismo testimonio de las Escrituras nos sirva de ejemplo como dice el apóstol Pablo para mantenernos firmes en nuestra fe en Cristo: "Y estas cosas les acontecieron como ejemplo, y están escritas para amonestarnos a nosotros, a quienes han alcanzado los fines de los siglos. Así que, el que piensa estar firme, mire que no caiga. (1 Cor 10:11-12)".